Lo primero, la bolsa. Yo, siempre aconsejo que la bolsa sirva para después poner en el carro. Hay unas bolsitas muy chulas y grandecitas, que con unos ganchitos, luego puedes utilizar de bolso para el carrito y así, puedes sacarle más partido.
Para cambiarle, por si fuera necesario para la vuelta a casa, deberíamos llevar un empapador, para no manchar nada, unos pañales, de la talla 2 ( yo optaría por la marca Dodot o Chelino), crema para el culete, 1 paquete de toallitas y un pijama o dos de algodón.
Además vas a necesitar un gorrito, unas manoplas, un par de patucos, y si no quieres que salga con un pijama de algodón, un conjuntito mono, de esos que te han regalado, y que probablemente, no se lo puedas volver a poner nunca, porque ya no le valga.
Da igual la época que sea, siempre es conveniente llevar un arrullo, más o menos gordito según el frío, y un par de chupetes.
No es necesario que lleves todo el carrito, con llevar el cuco vale, ¡ah!, sin olvidar los adaptadores para ponerle los cinturones en el coche, y unas sabanitas.
Otra cosa distinta, es lo que vas a necesitar en casa. Siempre hay cosas de las que se puede prescindir, pero sinceramente con ellas preparadas la llegada a casa se hace mucho más agradable.
En la siguiente entrada, intentaré hacer una lista y una serie de consejillos para tenerlo todo, todo y todo, preparado en casa, por ejemplo, cómo elegir el carrito, lo importante que resulta un calienta-biberones, el por qué tener una hamaca vibratoria,... etc, etc, etc. Pero no os agobies, iremos sin prisa pero sin pausa.
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